August 18, 2011
Muerte en la familia
Lo llaman infarto.
Dos queridos golpeados
con esa misma vara,
esa misma hacha al ceño.
Los perdimos a la tierra,
dejando nuestro círculo
roto.
Una duró cinco meses
cayendo de nuestras manos.
Silenciosa, su gracia, ingenio
y belleza se fueron borrando.
Sus ojos verdes nos miraban
como preguntando, sabiendo,
perteneciendo.
Una noche nos eludió
y las máquinas piadosas
la trajeron de vuelta
para morir lentamente.
Al final
logró escapar.
A nuestra collie
le fue mejor.
Una criatura menor,
sólo pasó un día
llorando a la deriva
con sus oscuros ojos
suplicantes. Entonces
fue levantada y
tendida en la mesa,
adorada, acariciada
y puesta en libertad.
Julie Hill Alger
Puedes leer el original aquí.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment